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ESPACIOS DE ENCUENTROS E INDAGACIÓN ADA

En el 27 Aniversario de la Asociación Darjeeling de Agni Yoga

Se dice que el cerebro y el cuerpo humano siempre responde a las energías sutiles del planeta Tierra y que nuestros antepasados sintonizaban mucho mejor que cualquiera de nosotros. ¿Qué nos está pasando?

Estamos rodeados de ondas de radio, tv, radares, microondas, móviles, satélites y todo tipo de campos electromagnéticos. Vivimos en un océano de ondas como nunca lo habíamos vivido antes. Estamos sumergidos en un flujo turbulento y en parte caótico de energías provenientes de múltiples fuentes.

Exposiciones Roerich

Se dice también que los rayos provenientes de Shámbala son más potentes que el rayo cósmico Amaterasu, y sin embargo tienen que abrirse paso hasta llegar a nuestro cuerpo energético, infundiendo esperanza y el conocimiento del Fuego Cósmico.

Una antigua leyenda dice que la humanidad ha de pasar por la resurrección del espíritu después de beber de las aguas de la mediocridad y del materialismo más oscuro. Y seguido vendrá la resurrección de la Jerarquía Blanca.

La Jerarquía o Hermandad Blanca de Iniciados tomarán decisiones el próximo año 2025 que se extenderán por otros 100 años, como ocurriera en el Cónclave de 1925.

Pienso que todos sabemos lo que tenemos que hacer. No son los libros sino nuestra luz interior la que nos guía. Es esta luz la que nos enseña, guía y dice cómo hacerlo.

La Jerarquía y sus grandes Maestros nos enseñan a relacionarnos con la Luz. Hoy día son muchos los grupos que trabajan unidos con los ideales espirituales en todo el mundo. Son una suerte de “Arca de Corazones Flamígeros”. En grupos de tres, seis, nueve y doce, tejen una red de triángulos a lo largo de todo el Planeta Tierra.

 

El pensamiento hace la realidad

Sabemos que hay una apatía ambiental entre los jóvenes y no tan jóvenes. Se requiere clarificar nuestras emociones y motivaciones. Hay que permitirles equivocarse y sobre todo orientarles hacia lo verdadero que es la Luz y lo Bello. Que no se pierda la innata curiosidad por lo desconocido, filosófico vivencial y espiritual. Y todo eso empieza con charlas y lecturas. Puntos de reunión y conocimiento.

Pronto enfrentaremos la existencia humana preguntándonos ¿cuánto nos han engañado? ¿para qué estamos aquí? ¿qué somos? ¿cómo encontrar la puerta entre tanta oscuridad y mentira? Tiene que haber un crecimiento directo hacia la luz, sin esperar que se den las circunstancias fortuitas, utilizando para ello toda la fuerza del espíritu.

¿Cómo podemos ayudar? Seamos amables y fuertes a la vez. Que tu voz sea agradable y armoniosa. Coopera codo con codo, hombro con hombro. Busca y encuentra.

Se cuenta que un Guruji llegó, habló y todos se sintieron bien. “Si la finalidad última de nuestro ser es alcanzar la conciencia espiritual y llegar hasta la comprensión del Uno que determinan el Orden y la Armonía del Amor Universal, ¿por qué no resolvemos los problemas de la vida de una vez por todas?”

A los niños no se les toca ni bombardea

Se dice también que la voz humana masculina es de alrededor de 110 Hz, y la de las mujeres 210 Hz. Cuando cantan o hablan en torno a los 174 Hertzios por segundo, se produce una condición psicológica y espiritual sanadora. Y a los niños hay que hablarles bien. Crear espacios de encuentros e indagación para que ellos también hablen de forma correcta. En las antiguas civilizaciones había Maestros de la Palabra, de los cantos, Salmos y Mantras; curaban mediante la voz. Por ello debemos buscar a las personas que escucharlas te produzcan un bien.

Escucha tu voz interior, y recuerda que hay “un sentido del Alma” que lo sostiene todo.

Este mes celebramos el 27 Aniversario de la Asociación Darjeeling de Agni-Raja-Yoga, creada con ese propósito: la de ser un faro de Luz y conocimientos para todo aquél que se acerca a nosotros.

Te esperamos en la montaña.

Leonardo Olazabal Amaral

www.shambala-roerich.com

MADURANDO LA PAZ

Vivimos tiempos extraños, confusos, en cierto modo… mediocres. ¿Por qué digo esto? Por la sencilla razón de que para dejar de ser mediocres hay que establecer primero la paz dentro de uno mismo. Y hoy día, el que más o el que menos, en su interior solo tiene alboroto, un pobre humanismo y una insensible moral, y nada de esto sirve para implantar la paz en el mundo.

Se precisa madurar la paz. Para ello precisamos espíritus iluminados, y ¿los hay? Y si los hay, ¿dónde están sus causas nobles? ¿Dónde sus instituciones? Entidades nobles, antisectarias, antidogmáticas y no exclusivistas. Instituciones que hablan de la miel del amor, del respeto y del diálogo, ¿dónde están?

Leonardo y la Paz

Leonardo y la Paz

Hay que unirse en triángulos fraternos. Promocionar y facilitar. No explotar y mancillar. Por ello hay que aprender a madurar la PAZ, y trabajar todos juntos para embellecer la Tierra. ¿No es eso lo que anhelamos?

En unas conferencias sobre la Kábala en Barcelona conocí, hace muchos años ya, a Z´ev ben Shimon Halevi, donde habló –entre otras excelentes enseñanzas– sobre la Escala de Jacob como sistema de comprensión metafísico. La escalera se hunde en el barro en sus primeros escalones. Los últimos se adentran en el mundo etéreo donde se sitúa el reino de los ángeles. Y dice: “Se trata del símbolo cósmico de pasar del mundo ordinario y material al otro de orden cósmico y espiritual. El grueso de la humanidad sigue aferrada al barro. Se requiere un gran esfuerzo y trabajo en los mundos inferiores antes de llegar a la iluminación”.

Así las cosas, en los años veinte del nuevo milenio me pregunto si la paz es posible. Una gran parte de la humanidad lleva sobre sí misma la lápida de la indiferencia, el dolor y la falta de visión. Son pocos los que se conocen a sí mismos de verdad, de una manera inteligente.

Crucial, Crisis, Cicatriz han de ser transformadas por Cambio, Crecimiento y Conciencia. Y todo ello con mucho tacto. Un tacto que ha de surgir de la percepción superior y ésta de la mente iluminada. Y no de una mente con prejuicios psicológicos y culturales. Cuando hay un trabajo espiritual se produce la transformación. Ser espiritual implica ser protector, ser pacífico, ser honesto. Algo obvio, porque lo que se es dentro, se es afuera.

Shaij Khaled Bentonnès dice en su obra “El Sufismo, Corazón del Islam”:

   “La verdad consiste ante todo en entrar en armonía con todas nuestras contradicciones, coger el bastón de peregrino y servir a la humanidad como una unidad pura y simplificada”.

El propio mensaje de Jesucristo es totalmente pacífico al implantar en el mundo el AMOR.

Comencemos a alejarnos de las maniobras oscuras, de los horrores de los conflictos. Potenciemos la Cultura Espiritual, la Fe Religiosa y las Artes. Y así entrar en la Era Luminosa de la Paz y de la Quietud de las Alturas.

Leonardo Olazabal Amaral

  Presidente y Fundador de la
  Asociación Darjeeling Agni
    y del Museo Bandera de la Paz Roerich