Hoy, 18 de mayo de 2024 celebramos el XXII Aniversario del pequeño Museo privado Bandera de la Paz Roerich de la Asociación Darjeeling Agni Yoga.

Además de algunos tesoros espirituales que se exhiben en las paredes y muebles del museo, hay siempre -junto con la música- un característico olor a almizcle de los Himalayas, acompañado del aroma de las fresias (la flor de la amistad preferida por M.M.).

22 Aniversario Museo Bandera de la Paz

VIRTUDES DEL VERDADERO ALMIZCLE

Sobre el Almizcle mencionado en los libros de Agni Yoga hay que decir que los investigadores de la medicina tibetana y ayurvédica lo usan desde tiempos inmemorables como parte de sus recetas medicinales. Según escritos muy antiguos su acción es equilibradora del sistema sutil de chakras y del sistema nervioso, además de restablecer las funciones normales del organismo. Su sutil poder nutre la mente y potencia la energía psíquica. Se le atribuye su cualidad ardiente y de fuego al relacionarse con las energías del sol. Su acción va dirigida especialmente a las personas que vibran en una alta sintonía espiritual, y que trabajan en un gran nivel de estudio o de responsabilidad y servicio. Quiere decir que si lo codicia un neófito le hará más mal que bien.

Almizcle

Hoy día -se vuelve a poner de moda- en las redes sociales los temas de yoga sobre la práctica del despertar de la Kundalini, sin entender que el desarrollo o despertar de la misma sólo es posible activarla sin peligro a partir de la Tercera Iniciación. Este fuego kundalínico, que ha de recorrer a lo largo de los canales de la columna vertebral y sus respectivos centros, sólo se ha de despertar cuando se hayan eliminado todas las impurezas y obstáculos de su recorrido. Por eso los yoguis y los ascetas no lo buscan, ni lo fuerzan mediante la voluntad y los ejercicios físicos, sino que mediante el Chakra Anahata (el corazón), y el Vishuda (el centro creador de la garganta) formando la línea vertical, se une al Ajna y el Sahasrara que generan la línea energética horizontal en la cabeza, formando con ello lo que se conoce esotéricamente la cruz en los cielos… Entonces, es cuando se cumple el Mandato: “buscar el reino de Dios y su Justicia y lo demás vendrá por añadidura”. Es decir que el ascenso de este FOHAT acontecerá sin peligro. Para eso hay que esperar a la Tercera iniciación o lo que es lo mismo a desarrollar una intensa e intuitiva inteligencia amorosa, verdadera compasión y transformación meditando en el chakra del Corazón (el Amor), y no trabajando los chakras inferiores (Muladhara, Svadisthana y Manipura).

Si ocurriera un cierto despertar accidental de este “fuego por fricción (kundalini)” quemando prematuramente las sutiles membranas y redes del cuerpo etérico, con el daño irreversible que ello supone para el cuerpo físico, además de la locura mental, tomar el té de la planta Tulsi (la albahaca sagrada) de India y diminutas porciones de Almizcle calmarán el fuego desatado, e inducirá a readaptarse a todos los nadis (meridianos y nervios) y chakras alterados. El desarrollo viene de la calidad magnética de arriba, no de abajo.

Almizcle en cofrecitos tibetanos

La fragancia del almizcle es más primitiva que misteriosa, tiene un olor a madera, un tanto terroso, penetrante pero delicado, limpio y etéreo con un toque dulce y cálido.

En la actualidad se usa en la alta perfumería para crear fragancias calmantes y duraderas. Sus notas potencian y fijan a otros perfumes como el cedro, la bergamota, el ámbar gris, el jazmín, o la flor de naranjo. Muy utilizado en la medicina china y árabe. El almizcle puro se extrae de la glándula del ciervo macho tanto del Tíbet, China, Nepal y Siberia. Un tipo de ciervo almizclero del Himalaya tiene situada su glándula almizclera entre los genitales y el rabo, otros cercano al ombligo. También en el Tíbet hay otro cuya glándula se encuentra detrás de las orejas, y todos ellos la excretan, sobre todo en primavera, dejando su olor en su piel o bien frotando arbustos, rocas y cortezas de árboles para atraer de esta manera a la hembra.

Esta substancia natural de color marrón anaranjado (o blanco) de origen animal se extrae ordeñando sus pocos gramos (de 10 a 25 g.) con una paleta de plata procurando no dañar al animal ni estresarlo (libre de toda crueldad), lo cual es muy difícil y de ahí su alto precio en el mercado, especialmente el de más alta calidad: el almizcle del ciervo real.

El propio Marco Polo en el siglo XIII hizo referencia al valor de éste en la antigua China y Mongolia.

Actualmente se usa el almizcle sintético (White Musk) buscando su característica suavidad y nota terrosa.

Lo más parecido en el mundo de las plantas es el musk de las semillas Abelmoschus oriunda de Egipto e India, el Geranio almizclado (Erodium moschatum), y la esencia de Mimulus que fomenta el temple de los nervios y da coraje ante las situaciones difíciles.

Por supuesto ni las moléculas artificiales, ni el musk vegetal tienen las características mencionadas al principio de este artículo. Si se desea adquirir el almizcle auténtico hay que comprarlo en el Tíbet o Nepal. Los árabes son los principales compradores para perfumar sus ropas, cabellos y barba. También hay que decir que hoy día todo se adultera o falsifica y con el almizcle pasa lo mismo.

Se ha observado que cuando se toma una pizca muy diminuta, extraída con un diminuto palillo de dientes, y se deposita sobre la superficie de un buen té caliente, se forma un arco iris sobre su superficie debido a su grasa perfumada. Tras beberlo a sorbos, unos minutos después, se aprecia una calma y a la vez un vigor inusitado en el corazón, y no en lo sexual como se afirma e interpreta, dado su poder de fuego. Es por eso por lo que en la literatura del Agni Yoga se le nombra como “el fósforo del espíritu”.

Caravana buscadores de almizcle

El aforismo 465 del libro CORAZÓN dice que: Se percibe mejor el halo tipo aura en una fotografía kirlian después de haber tomado un poco de almizcle.

Sí, así es comprobada sus características con el péndulo (Radiestesia); ante cualquier enfermedad o decaimiento el médico iluminado del pasado recetaba primero un fuerte tónico medicinal, una substancia ardiente como el cedro del himalaya, o el ámbar a falta del auténtico almizcle.

Hoy día, para proteger a los animales que llevan este don, y que por lo tanto no se puede producir la cantidad necesaria para tanta gente, hay que usar el almizcle vegetal y en especial las plantas que comen los animales almizcleros. Su compuesto será más débil, pero a la larga producirán igualmente su efecto curativo.

Leonardo Olazabal Amaral

Escritor. Profesor de Yoga.

Presidente de ADA Roerich